... y ahí voy a dejar mi arrebato libertario. Quizá sea demasiado mayor ya, pero la Historia y mi experiencia me han enseñado a desconfiar de los virtuosos, ya sea agrupados o predicando en el desierto. Y sobre todo a apartarme de ideologías y soluciones simples a problemas complejos. Y aunque de Ortega haya cosas que no me van, hago mío eso de «Yo soy yo y mi circunstancia; si no la salvo a ella, no me salvo yo»